Nos despertamos cerca de las 11:00, y nos adentramos en el Bosque Verde. Pero cerca de las 12:00, de pronto se soltó una llovizna; había oído que en el bosque llovía seguido, pero nunca me imaginé que lloviera de una forma tan brutal y continua. Nos fuimos a refugiar a la sombra de un enorme roble y esperamos a que la lluvia cesara. Pikachu temblaba cada que un trueno caía...
Total, esperamos cerca de hora y media y pudimos salir con unos tenues rayos de sol. La caminata el resto del camino resultó perfecta y sin contratiempos. Al pasar por el bosque pudimos ver una gran cantidad de Pokémon de tipo insecto y planta por los alrededores: varios Caterpies y Weedles jugando en por el suelo, grandes Tangela que iban en grupo, uno que otro Oddish o Parras perdido por allí, varios capullos de Metapod y Kakuna, un Bulbasaur salvaje que tuve fuerte tentación de atrapar, pero huyó antes de que lograra acercarme y varios grupos de Butterfrees y Beedrill (estos últimos nos atacaron, y no hicimos otra cosa que correr)-
A las 6 de la tarde, ya estaba oscuro, pero aún así continué caminando hasta que la oscuridad parecía tragarnos vivos. Saqué a Charmander de su pokébola y éste prendió una fogata con unas ramas que bajé de un árbol.
Eran cerca de las 8 y Charmander ya estaba dormido, pero Pikachu y yo estábamos escuchando los curiosos ruidos que había en el bosque: cientos de cantos y hasta me pareció escuchar un Fearrow por allí, pero ya no pude seguir oyendo, porque de inmediato se me empezaron a cerrar los ojos al escuchar el llanto de un Jigglypuff lejano y quedé profundamente dormido
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